Por: Mateus Mancilla
Diez de la noche. Todo parece pacífico en los pasillos hasta que la primera persona llega. Desde la sala de espera se le puede ver totalmente inconsciente y cargada en hombros por dos sujetos desesperados. Es la primera víctima que pasa a la sala de emergencia de la clínica San Judas Tadeo, en el distrito de San Miguel.